• Oroborus

Versión analizada

2.0.20, publicada en febrero de 2010.

Página oficial

http://www.oroborus.org/?node=Main

(Nota de agosto de 2020: Ha desaparecido a principios de año, existe sin embargo una réplica en The Internet Archive , bastante funcional. La dirección web original sigue activa pero ahora pertenece a un proyecto diferente).

Estado actual

En el momento en que escribo esto la versión más reciente de Oroborus es la 2.0.20, y tiene ya más de seis años. Pero los últimos cambios relevantes en su código fuente datan de más atrás, principios de 2006; ha transcurrido mucho tiempo desde entonces, así que casi con seguridad el proyecto ha sido abandonado. Además alguna sección de su página web se encuentra desatendida y con contenidos obsoletos.

Gozó de una modesta popularidad hace una década, y algunos sistemas operativos siguen incluyéndolo en sus repositorios de paquetes —Gentoo Linux, NetBSD , Debian, entre otros—. Para el usuario medio de Unix es más bien historia pasada, aunque no descarto que haya alguien que aún lo utilice: encontró un angosto nicho como reemplazo ligero de Openbox en LXDE o Metacity en Gnome 2.

Características resumidas

Esc. Virtuales Menús Iconos Temas Dockapps At. de teclado Barra de tareas
Sí No 1 No 2 Sí No Sí 3 No

1 Mediante DeskMenu.

2 Mediante la aplicación DeskLaunch: estos iconos sirven para lanzar aplicaciones y no, como en entornos antiguos, para representar ventanas minimizadas.

3 Funcionalidad ya presente en Oroborus, ampliada por KeyLaunch.

Descripción

Captura de Oroborus

Oroborus: tema «Pillage», fondo de escritorio relajante. Hay una terminal (Aterm), y un reloj que me gusta mucho, Dclock .

El desarrollo de Oroborus comenzó de la mano de Ken Lynch y sus primeras versiones aparecieron en 2001. Poco después —en 2002, probablemente— el trabajo pasó a manos de Stefan Pfetzing. Según lo describen los autores :

«Oroborus es un gestor de ventanas realmente minimalista, que pesa unos 75 KB en una máquina [basada en] PowerPC y cerca de 63 KB en otra de tipo x86. "Minimalista" significa que Oroborus no proporciona algunas cosas que otros gestores sí incluyen. De modo que necesitaréis algunas de las herramientas externas también incluidas en este proyecto.

»La principal ventaja es que con esto ganáis mucha flexibilidad».

No se equivocan: empleado sin añadidos, Oroborus es un software muy austero que se limita la funcionalidad más básica. Permite al usuario minimizar ventanas —ocultándolas o enrollándolas—, maximizarlas y alterar su posición y tamaño. Cuenta también con atajos de teclado personalizables para la mayoría de acciones. Las únicas características que, a mi parecer, contradicen un poco esa visión espartana son la posibilidad de usar escritorios virtuales, y la de alterar el aspecto de la decoración mediante temas gráficos.

Sus creadores lo concibieron para ser fácil de ampliar con accesorios de terceros. De modo que resulta posible recurrir con éxito a casi cualquiera de ese amplio catálogo de paneles, paginadores, menús y demás que flota disperso por Internet. Sin embargo, desde la misma página oficial del proyecto se distribuyen tres pequeñas utilidades, escritas por los programadores de Oroborus como complementos opcionales del gestor —aunque pueden utilizarse de forma independiente en otros entornos—:

DeskLaunch:
Su misión es colocar iconos sobre el fondo del escritorio para lanzar aplicaciones, un poco en la línea de Windows, KDE y la mayoría entornos gráficos modernos.
DeskMenu:
Un menú basado en GTK2. Puede invocarse al clicar con el ratón sobre el escritorio, o asociado a una combinación de teclas. Sirve para iniciar programas, controlar los escritorios virtuales y —gracias al submenú de tareas— traer ventanas a primer plano.
KeyLaunch:
Permite definir atajos de teclado para ejecutar comandos y arrancar aplicaciones. Equivalente al conocido Xbindkeys .

La configuración de Oroborus viene especificada en el fichero ~/.oroborusrc, de texto plano y bastante simple, oculto en el directorio raíz del usuario. Los de sus tres complementos enumerados arriba son, respectivamente, ~/.desklauchrc, ~/.deskmenurc y ~/.keylaunchrc.

Me queda hablar de los temas visuales. Con Oroborus se incluyen dieciocho de ellos, y tal vez sea posible encontrar más en Internet. Basados en imágenes XPM, cambian la apariencia del gestor pero no su comportamiento. Algunos, además, pueden dibujarse empleando diferentes conjuntos de colores, llamados aquí schemes.

Primeras impresiones

Captura de Oroborus

Oroborus con otro aspecto diferente, resulta versátil en esta faceta: «Cruxish». Inspirado por «Crux», un tema que fue popular en la década de 2000. Aquí además puede emplearse con diferentes combinaciones de colores o schemes.

Empecé usando Oroborus sin ningún añadido, para comprobar qué es capaz de hacer por sí mismo.

En efecto, los autores no iban nada desencaminados: es, como decían ellos, minimalista. Nada de menús, iconos, paginadores o barras de tareas. No me quedaba otro remedio que recuperar las ventanas minimizadas pulsando [Alt] y [Tab] hasta que la deseada saltase a primer plano —lo cual no es cómodo ni preciso—, y ejecutar mis programas desde una terminal. La solución que encontré para el primer inconveniente fue enrollar las ventanas —es decir, esconder sus contenidos y dejar visible sólo los títulos— en lugar de ocultarlas. Así lo escribí:

«En realidad con el Oroborus básico es más práctico "sombrear" las ventanas que ocultarlas totalmente, porque así al menos uno puede encontrarlas rápidamente en el escritorio».

Los atajos de teclado definidos en su configuración inicial —entiéndase por tal cosa la suministrada en el fichero /usr/local/share/oroborus/defaults— no me parecieron muy confortables, y de hecho interfieren con los de algunas aplicaciones. Intenté redefinirlos usando en el lugar de [Alt] la tecla [Windows] —normalmente sin función, en mi sistema posee el modificador Mod3—; mas Oroborus parece que no admite ese valor, sólo [Ctrl], Mod1 —es decir, [Alt]— o [Mayúsc], y las diversas diversas combinaciones entre ellas.

Por último, el tema visual que emplea el gestor por defecto, «Pillage», con sus relieves, aspecto metálico y decoración redondeada, no es muy de mi estilo y lo encontré un tanto artificioso. Aunque tampoco me disgustó, es agradable a su manera.

Usando Oroborus

Mi estancia con él se ha prolongado seis semanas, tiempo suficiente para probar varias formas de trabajar diferentes. La sencillez de los ficheros de configuración de Oroborus y sus retoños —DeskMenu, KeyLaunch y DeskLaunch— facilita en gran medida los experimentos del usuario.

Considerado en solitario, sin complementos, no sé muy bien a qué otros gestores compararlo. Puedo adivinar rasgos sueltos de Aewm, al que Stefan Pfetzing citó como inspiración, AHWM o Golem; aunque a decir verdad Oroborus no se parece demasiado a ninguno de ellos.

No obstante, lo que los autores recomendaban, y lo que hace la gran mayoría de usuarios —o hizo en su momento—, es recurrir a accesorios que le añadan funcionalidad al gestor. Yo probé varios paneles y barras de tareas, y el que más me satisfizo fue LxPanel —parte de LXDE—. Encontrar un paginador que me contentase me costó más: me quedé con Ipager , que no es perfecto pero sí cumple razonablemente bien su cometido. Y si alguien desea iconos en el escritorio la solución más completa se encuentra probablemente en ROX Filer; otras alternativas interesantes son Idesk o Wbar .

Por supuesto no podía dejar de echar un vistazo a DeskMenu, DeskLaunch y KeyLaunch. Siguen la misma línea de Oroborus: minimalismo con pocas concesiones, hasta el punto de resultar básicos y un tanto rudimentarios. Tomemos como muestra al tercero: no permite combinaciones de teclas con otros modificadores que [Alt], [Mayúsc] y [Ctrl] —de nuevo, olvidaos de la tecla [Windows]—, y la sintaxis del archivo ~/.keylaunchrc sacrifica un poco de elegancia y legibilidad en favor de la concisión. DeskLaunch, por otra parte, coloca iconos fijos en el escritorio para lanzar aplicaciones, y como prueba de su edad sólo es compatible con imágenes en formato XPM.

Captura de Oroborus

Rescatando datos de un disco duro que perdió sus particiones... Un escritorio rojizo con el tema «Slimline». Un paginador en la esquina superior derecha, a la izquierda Mdgclock , y abajo iconos para ejecutar cosas creados por DeskLaunch.

Y falta hablar de DeskMenu. Está elaborado con GTK2, y por ello reclama más memoria RAM que el propio gestor, aunque en 2016 no se trata de un consumo de recursos importante. Tuve que parchearlo para que funcionase correctamente, de lo contrario era imposible invocarlo clicando con el ratón sobre el escritorio. Me parece muy recomendable para la gente que acostumbre a ocultar ventanas pero no utilice paneles, porque incluye también un menú de tareas. Es el sistema de menús que mejor se adapta a Oroborus, aunque probé otros un poco de pasada: 9menu me pareció tentador mas no sirve para recuperar ventanas minimizadas, y Aemenu —parte de Aewm— no aporta nada que no posea ya DeskMenu, y en Oroborus no puede asociarse al ratón.

Entre los temas gráficos hay bastante variedad, si bien en la calidad se aprecian altibajos. Ahora, el gestor carece de una interfaz para probarlos y seleccionarlos. Existe un arcaico programa que logré rescatar del abismo , el «Oroborus Theme Changer», que trata de cubrir este hueco de una forma un tanto tosca: basado en Tcl/Tk, cumple a grandes rasgos lo que promete, aunque sea a costa de trastocar el fichero ~/.oroborusrc añadiendo saltos de línea gratuitos, y matar el proceso de Oroborus de vez en cuando; no merece la pena, vaya.

Lo cierto es que en estas semanas he aprendido a desenvolverme con el gestor, aunque nunca he llegado a sentirme realmente cómodo con él. Lo he usado en solitario, sin ningún tipo de complemento, y con varias combinaciones de ellos —incluido el siempre útil Dmenu—. En todos los casos he llegado a ese punto de «esto marcha bien, puede valer», pero siempre he echado a faltar algo. Parte del problema es que Oroborus cuenta con funciones que luego le presenta al usuario de forma poco consistente. Tienes escritorios virtuales, pero no un paginador u otra herramienta que te permita controlarlos. Puedes hacer una ventana visible en todos ellos —«sticky»— con el atajo de teclado apropiado, mas no desde la propia interfaz. Y si la minimizas, disfruta del gran placer de pulsar repetidamente [Alt] y [Tab], mareando toda la pila hasta que vuelva a aparecer..., o bueno, ríndete y recurre a algún accesorio externo como DeskMenu. A ese tipo de cosas me refiero.

Opciones de personalización

Estéticamente Oroborus resulta flexible gracias a su modesto repertorio de temas gráficos. Algunos de ellos admiten como propina diferentes combinaciones de colores. Y luego siempre cabe la posibilidad de hacer cambios más sutiles, como la fuente que se empleará al escribir el texto de los títulos, o la separación en píxeles entre los controles de las ventanas.

Hablando de detalles más prácticos, es posible entre otras cosas modificar atajos de teclado, el modelo de enfoque, o la presencia y el orden en que se muestran los elementos de la decoración de las ventanas. También especificar una lista de ellas —enumeradas por su clase, el primer valor del atributo WM_CLASS— que se dibujen sin decoración, algo conveniente con ciertos relojes. No esperéis la versatilidad y esas interminables listas de ajustes nimios que ofrecen FVWM o IceWM, Oroborus no iba en esa dirección; sin embargo, de las opciones más obvias no falta casi ninguna.

Ah, casi se me olvida: no se pueden alterar las funciones de los botones del ratón. Por ejemplo, clicar con el izquierdo sobre su título trae una ventana a primer plano, y con el derecho la relega al fondo de la pila; así se escribió y así debe ser.

Documentación

Captura de Oroborus

El tema «Defold» ofrece una apariencia gris, así como metálica... No, ese gatito encantador no va incluido. Puede verse a DeskMenu en acción.

Con mi copia de Oroborus se adjuntan dos páginas de manual, una dedicada al gestor en sí y otra al fichero ~/.oroborusrc. Muy esquemáticas, no explican casi nada útil. Al menos el archivo de configuración está bien comentado...

Las versiones más antiguas —lo he comprobado con la 1.14.0, publicada en 2001— sí incluían una guía de uso escrita en HTML, pero por alguna razón fue descartada.

Aciertos

Inconvenientes

Conclusión

Mes y medio de uso casi diario prueba que Oroborus funciona bien. Y resulta divertido construirte un entorno a medida juntando piezas de orígenes diversos, al menos si dispones de tiempo que dedicar a estos experimentos.

Ahora, la idea tiene sus límites. Un panel de aquí, un menú de allá y el gestor no siempre se compenetran de forma perfecta, y yo tuve que probar varias utilidades del mismo tipo hasta descubrir la mejor combinación. Aun así no dejé de percibir mi entorno como una especie de Frankenstein, con partes cosidas unas a otras de un modo burdo.

Además, esta clase de arreglos no posee ninguna ventaja respecto a gestores que ya ofrecen de serie todas estas características. Fluxbox, IceWM o JWM son soluciones más coherentes y eficientes.

Galería de imágenes

Aún quedan detallitos que ver:

Captura de Oroborus

La imagen es antigua, de agosto de 2001, y muestra al Oroborus Theme Changer en funcionamiento: sí la ventanita blanca. Hay también un panel en el borde inferior, y después de darle algunas vueltas he averiguado que se trata de Fspanel . (La captura no es mía: fuente ).

 Captura de Oroborus

Usando el gestor sin complementos, sin un panel ni un triste menú de tareas, encontré lo más cómodo era sombrear ventanas. En la imagen se ven varias abajo, a la izquierda.
Captura de Oroborus

Dos cosas: el panel de LXDE (LxPanel) en el extremo inferior de la pantalla —funciona perfectamente aquí—, y una partida a Brogue , uno de los roguelikes más llamativos que existen.

 Captura de Oroborus

Dmenu —esa barrita gris con texto, abajo del todo— es una herramienta magnífica en cualquier entorno, ideal para iniciar aplicaciones.
Captura de Oroborus

Un escritorio sideral con una decoración inspirada en Apple, y de nuevo el Oroborus Theme Changer en funcionamiento. El panel empleado es Fbpanel. (La captura no es mía: fuente ).

 Captura de Oroborus

ROX Filer, el navegador Links en modo gráfico, y a la izquierda un menú desplegado —DeskMenu, obviamente—.

Descargas

¿Alguien quiere probar Oroborus? Dejo aquí material que puede interesarle:

 

Artículo escrito el 13 de septiembre de 2016.
Revisado el 2 de agosto de 2020.

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